Era previsible que la presión fiscal para cubrir posibles déficit presupuestarios durante el próximo ejercicio se centrase en la subida de tipos de los Impuestos sobre el alcohol y el tabaco, pendientes de una subida en los hidrocarburos, el RD-Ley 3/2016, de 2 de diciembre (BOE del sábado 3 de diciembre) también trae consigo modificaciones en el ámbito del Impuesto sobre Sociedades, en el mantenimiento del Impuesto sobre el Patrimonio para el 2017, en un nuevo tratamiento del aplazamiento y fraccionamiento de determinadas deudas tributarias y de cambios en el ámbito social al incluir, entre otras, la actualización del salario mínimo interprofesional siendo todas estas medidas que no deben pasar desapercibidas pese a que no den lugar a charlas profundas de corrillo, espacios en noticiarios, como serán una subida en el alcohol del 5 por ciento y en el precio del tabaco.