Introducción a la técnica del mapeo del conflicto: 6 preguntas clave a realizar
Gema Murciano
Codirectora de sepín Extranjería . Coordinadora de sepín Mediación y Arbitraje . Redacción Jurídica de Sepín
Introducción
Desde siempre, al adentrarnos en un territorio desconocido, los mapas han jugado un rol importante a lo largo de la historia ya que a través de dibujos o signos, se nos transmite una visión global de la realidad que nos permite ir en la dirección correcta, o utilizado como técnica, dimensionar mejor la situación existente.
Cuando unas partes se sientan por primera vez delante de un mediador hay que tener en cuenta que existen dos factores problemáticos que el profesional de la resolución de conflictos debe de clarificar:
– La falta de información
– Y la falta de concreción
Respecto de la primera, hay que tener en cuenta que las partes vienen con su narrativa aprendida, y al mediador le faltan elementos para comprender por qué ¿Cómo lo perciben las actitudes son las que se muestran. El mapeo del conflicto no solo pone de manifiesto aquella información de la que adolece el analista sino que también le permite a éste establecer posibles vías de acceso.
En relación con la falta de concreción, excepto en lo que haga referencia a conceptos técnicos, hay lenguajes que son potencialmente vagos, que no encajan en una idea clara y necesitamos concretarlos.
Para que durante la mediación sea posible el acercamiento de las partes, es básica la existencia de un mapa con las vías conceptuales mínimas en el que podamos orientarnos, permitiendo establecer una línea de actuación que nos haga comprender todas las variables que influyen en él, y a la vez, que nos ayude a lograr una respuesta satisfactoria al mismo.
Diferencias con el genograma
En los primeros inicios de la mediación y dentro del ámbito familiar, se solía comenzar con un genograma. Un genograma es una representación gráfica (en forma de árbol genealógico) de la información básica de, al menos, dos generaciones de una familia (padres e hijos si los hubiere).
Este árbol genealógico incluye información sobre su estructura, los datos demográficos de los miembros y las relaciones que mantienen entre ellos. La idea era proporcionar “de un vistazo” una gran cantidad de información, lo que permite no sólo conocer a la familia, sino realizar hipótesis acerca de la relación entre el problema y el contexto familiar, la evolución del problema a lo largo del tiempo, su relación con el ciclo vital de la familia, etc.
Posteriormente se le ha ido añadiendo más información y su uso ha trascendido el ámbito familiar para adoptarse ante cualquier conflicto.
¿Cuáles son estas preguntas básicas?
Para empezar a construir el mapa que nos oriente en el conflicto tenemos que realizar varias preguntas. Conforme a nuestra experiencia, estás son las más efectivas:
1.- ¿Quiénes son las personas en conflicto?
Se trata de conocer datos biográficos relevantes, como puede ser la edad, ¿cómo se relacionan entre ellos?, ¿hay relación de poder?, ¿hay terceras personas que tienen un interés indirecto en el resultado de la disputa, y que no se sienten directamente involucrados?, ¿hay coaliciones que puedan afectar, tanto para bien como para mal, en el desenvolvimiento del conflicto? Mucha de esta información surgirá durante el desarrollo del relato.
2.- ¿Qué motivos han dado pie al conflicto?
¿Cómo lo perciben?, ¿cuáles son las emociones? Al igual que en las subpreguntas del grupo anterior la mayoría de estas respuestas aparecen durante la narración.
3.-¿Cuáles son las mayores preocupaciones?
4.-¿Qué es lo que desean?
5.-¿Para qué lo quieren?
6.-¿A qué tienen miedo?
Respondiendo a estas preguntas es fácil que se pueda empezar a tomar decisiones acerca de establecer una línea de actuación que conduzca a encontrar la salida del conflicto y, por otro lado también ayudará a saber qué información falta para tener una visión global.
¿Cómo saber que un mapa del conflicto está bien hecho?
Un mapa del conflicto está bien hecho cuando nos responde a las causas del mismo, los problemas de relación entre las partes, las discrepancias en la interpretación de los hechos, cuáles son los intereses de cada parte, los compartidos y los incompatibles, cuáles son los obstáculos principales…
Conociendo toda esa información se podrán generar opciones conjuntas de solución.
Los símbolos
Heredados de las técnicas de intervención de otras disciplinas existe una especie de consenso en la utilización de determinados símbolos para realizar el mapa.
- Un cuadrado simboliza una parte masculina, normalmente en su interior va unos dígitos con la edad.
- Un círculo identifica una parte femenina, al igual que en el caso anterior, en su interior figura la edad del sujeto.
- Una línea continua simboliza una relación estrecha.
- Una doble línea continua significa una alianza.
- Una línea discontinua identifica una relación ocasional.
- Una flecha significa una relación de poder.
- Una línea ondulante viene a plasmar una relación de conflicto entre las partes.
- Una línea continua atravesada por dos rayitas simboliza una relación deteriorada.
Veámoslo aplicado en un caso.
Adán, Abel y Eva son tres hermanos que han recibido la herencia de una vivienda tras el fallecimiento de sus progenitores.
Qué hacer con la vivienda está siendo un quebradero de cabeza ya que Adán quiere mantener la vivienda, dado que ha sido la casa que perteneció a su bisabuela, es el lugar en la que nació su madre, todos se han criado allí, y que, tanto el disfrute de la misma, como los gastos, sean compartidos por los tres hermanos.
Eva por su parte, prefiere venderla ya que no se lleva nada bien con la mujer de Adán, cree que compartir vivienda y gastos puede generar problemas, no sólo con ella, sino también con su hermano Abel que vive fuera de España y no viene todos los años, y ella ya no puede asumir más gastos. Si la vivienda se vendiera, con su parte podría reflotar su negocio de floristería.
Su marido la presiona para conseguir la venta, además desde hace tres años no acude a las reuniones familiares desde que tuvo un percance con su cuñada.
Abel vive en México desde hace 10 años, ha iniciado una nueva vida allí y no necesita el dinero de la venta, dice que le gustaría que la vivienda se quedara en la familia, pero acatará lo que diga la mayoría. Delega su decisión en Abel con el que tiene una relación especial dado que son gemelos.