La utilización de Google Maps como prueba en juicio

No vamos a descubrir ahora el poder de las nuevas tecnologías, el progreso que suponen y lo que nos facilitan nuestra vida diaria en muchos aspectos.

Pero, además de esto, si utilizamos los medios que tenemos a nuestro alcance también podemos beneficiarnos de ellos en nuestra calidad de abogados, para reforzar nuestras alegaciones en juicio.

Este es el caso que traigo a colación en este blog: la utilización de Google Maps para sembrar las dudas de que una persona no se acercó a más de 100 metros de la víctima cuando tenía una orden de alejamiento.

Los antecedentes del caso son los siguientes: el órgano judicial fijó una medida de protección consistente en la prohibición de acercamiento a menos de 100 metros de la víctima, expareja del obligado, y madre del hijo en común, menor de edad.

Un día el padre quedó con el menor para jugar al frontón y, consciente de no poder acercarse a la vivienda en la que vivía con la madre y ante la ausencia de teléfono móvil del niño, convino con aquel que le avisaría con el claxon del coche, circunstancia que el menor relató a la madre, provocando que aquella llamara a la Policía y le denunciase por quebrantar la medida.

En primera instancia, el Juzgado de lo Penal n.º 2 de Barakaldo condenó al acusado por la comisión del delito del art. 468.2 CP, pero este recurrió dicha resolución alegando error en la valoración de la prueba, puesto que el Juez de instancia no tuvo en cuenta el pantallazo que este hizo de la aplicación para móviles “Google Maps”, de la que se desprendía que la distancia entre el lugar en el que quedó con su hijo y la vivienda en la que estaba la madre eran 105 metros, por lo que no había quebrantado la medida cautelar.

La AP Bilbao, en su Sentencia de 24 de julio de 2015, resuelve el recurso y decide revocar la sentencia de instancia, puesto que sí que tiene en cuenta el pantallazo de Google Maps. El razonamiento del Tribunal es el siguiente:

  • Por un lado, la beneficiaria de la medida de protección relató que vio de lejos al acusado, lo que confirma que este no quiso acercarse al domicilio.
  • Por otro, el pantallazo de Google Maps, aunque no lo acredite de manera exacta, sí suscita dudas de que el obligado al cumplimiento de la medida estuviese a menos de 100 metros de su expareja, lo que hace que la Audiencia decida aplicar el principio “in dubio pro reo”, al no existir la constatación de que se incumpliese la orden judicial.

En conclusión, esta sentencia nos enseña que tenemos medios a nuestro alcance de los que nos podemos aprovechar para defender de una manera más eficiente los intereses de nuestros clientes, y este es solo un ejemplo, puesto que Google Maps puede servir también para indicar el suelo no consolidado de una finca o para llevar a cabo la localización y ubicación concreta de unos inmuebles, por ejemplo.