La Gran Recogida de Alimentos: es nuestro momento
Mónica Varela Louro
Directora de Marketing de Sepín
Mi nombre es Mónica. Soy la directora de Marketing de Sepín y hoy, por primera vez en este blog jurídico, no vengo a hablar de temas legales, normativas ni Reales Decretos. Hoy vengo a hablar de Humanidad. Todos somos conscientes de la terrible época que estamos viviendo para muchísimas familias españolas. Más allá de la implacable enfermedad, miles de familias se han quedado sin trabajo, sin medios para subsistir. Familias que jamás pensaron encontrarse en esta situación, hoy se ven obligadas a pedir ayuda a familiares, amigos, parroquias y bancos de alimentos.
Imagino ese momento y como madre de 3 niñas, me estremezco. El momento en el que te haces consciente de que, o pides ayuda, o tus hijos no van a comer mañana. Te tragas la dignidad, el orgullo y solo piensas en sobrevivir un día más.
Ojalá pudiésemos facilitarle trabajo a todas esas familias, pero nos damos de bruces con una realidad que se empeña en ser cruel y bastante tenemos con mantener el nuestro.
Porque algunos somos unos privilegiados. Algunos podemos seguir trabajando, aunque sea desde casa. Podemos seguir dando cenas ricas a nuestros niños, pagando las facturas e incluso yendo una tarde al cine.
Esta semana, del lunes 16 al domingo 22, se celebra la Gran Recogida de Alimentos. Veremos carritos llenos en las cajas de los supermercados, carteles reclamando nuestras donaciones, voluntarios pasando frío en las calles y colas en las iglesias para aportar nuestro granito de arena.
En Sepín trabajamos 80 personas y, nuestra compañera Jessica, responsable de Administración, nos ha hecho una propuesta que nos ha encantado. Este año, además de entregar nuestro paquete de pasta, arroz o legumbres de forma individual, queremos colaborar corporativamente. Y, para ello, apelamos a todos nuestros clientes y amigos para que entre todos aportemos mucho más.
Por eso, el 25% de todas las ventas de suscripción, contratadas on·line a través de nuestra tienda, del 16 al 30 de noviembre de 2020, será donado a FESBAL (Federación Española de Bancos de Alimentos) y, si el cliente nos lo autoriza, haremos la donación en su nombre y así el beneficio fiscal será suyo.
Porque debemos ser conscientes, ahora más que nunca, de la importancia de este tipo de campañas humanitarias y de cómo las empresas podemos colaborar con estas iniciativas.
¡Gracias!